La palabra hebrea Ebén significa “piedra“. En el contexto bíblico, no solo hace referencia a una piedra literal, sino que también simboliza firmeza, fundamento, testimonio y recordatorio de la presencia o ayuda del Eterno. Es una palabra frecuentemente usada para representar a YHWH como roca de salvación o para marcar momentos claves en la historia del pueblo de Israel.
Sinónimos:
- Piedra
- Roca
- Cimiento
- Fundación
- Monumento
- Testigo
“Tomó Samuel una piedra y la colocó entre Mizpa y Sen, y la llamó Eben-ezer, diciendo: Hasta aquí nos ayudó YHWH.”
— 1 Samuel 7:12
(Eben-ezer = “Piedra de ayuda”)
Importancia espiritual:
Ebén es un recordatorio poderoso de que el Eterno es nuestro soporte inquebrantable, la base firme sobre la cual debemos edificar nuestra vida. Así como los antiguos colocaban piedras para recordar milagros, pactos o victorias, hoy también podemos reconocer a YHWH como nuestra roca eterna. Además, el Mesías Yeshúa es llamado “la piedra angular”, sobre quien se edifica toda la fe.
Oración sugerida:
“Padre amado, Tú eres mi roca eterna, mi fundamento seguro en medio de la tormenta. Así como Samuel levantó una piedra para recordar Tu ayuda, hoy levanto mi voz para agradecerte, porque hasta aquí me has sostenido. Edifica mi vida sobre Tu Palabra, y haz de mí una piedra viva consagrada para Tu propósito. En el nombre de Yeshúa, Amén.”