Zará en hebreo significa “sembrar” o “plantar semilla“. Es un término agrícola que describe el acto de colocar una semilla en la tierra para que crezca y produzca fruto.
Sinónimos:
- Sembrar
- Plantar
- Esparcir semilla
- Propagar
“Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán.”
— Salmos 126:5
Importancia espiritual:
Zará nos enseña sobre el principio del Reino de YHWH: todo gran fruto comienza con una pequeña semilla sembrada en fe. Así como sembramos en la tierra para cosechar en su tiempo, también sembramos actos de amor, obediencia y fe que, en el tiempo perfecto del Eterno, traerán una cosecha abundante. Sembrar es un acto de esperanza y de confianza en el proceso divino.
Oración sugerida:
“Padre amado, enséñanos a sembrar buenas semillas en Tu Nombre. Que cada palabra, acción y pensamiento sean plantados en Tu verdad, y que nuestra vida produzca frutos de justicia, amor y fe para Tu gloria. Ayúdanos a confiar en Tu tiempo perfecto. Amén.”